El pecado sexual no sólo afecta a individuos, sino a familias completas. No surge de la noche a la mañana, sino que es un proceso compuesto demuchos elementos, experiencias y tiempo. En este libro, el autor comparte sus experiencias y testifica de lo que Dios hizo en su vida y matrimonio tras haber luchado contra la homosexualidad desde la temprana edad.
Con un estilo sencillo y muy claro, el autor comparte sus vivencias para que, de la misma forma que Jesús lo liberó y restauró, Él puede liberar y restaurar a cualquier persona que está luchando con el quebrantamiento sexual. Él le reta a que acepte los recursos que Dios ha provisto para la recuperación y libertad, sin temor a ser malentendido o menospreciado.
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