Esta intrigante novela cuenta la historia de el exdetective de homicidios Ray Quinn. Ahora, como investigador privado, su vida no tenía grandes aspiraciones. Era todo mucho más tranquilo salvo por algún que otro enfurecido esposo mujeriego de una cliente que lo hacía sobresaltar.
Retirado de los casos de homicidio y con una discapacidad dolorosa, las opciones de Ray eran escasas. Se limitaba al trabajo, mantenía al impetuoso compañero Crevis con vida, y pasaba noches enteras con su amigo de confianza Jim Bean. Eso es todo lo que puede esperar.
Cuando un nuevo cliente aparece, Ray se encuentra en una sala de juntas increíblemente grande sosteniendo en su mano un cheque con ceros suficientes para finalmente rescatarlo de su hoyo financiero. La tarea parece fácil: encontrar a Logan Ramsey, un expolicía convertido en agente de seguridad que ha robado información corporativa secreta. Pero pocas cosas son fáciles en el mundo de Ray, independientemente de la cantidad de ceros en el cheque.
En lo que debería ser un caso sencillo, él tropieza con Logan Ramsey en un hotel de mala muerte. Pero Ray no fue el primero en encontrarlo. Con la inesperada muerte de Logan, la información del cliente desapareció. De repente, la línea que divide a los buenos de los malos no es tan clara. Con un pie en ambos mundos y con un claro panorama de un final “infeliz” que bien podría ser el suyo, ¿cuál elegirá Ray?
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