Por cada familia que ha tenido un hijo pródigo, también ha habido un hermano que ha permanecido fiel a lo largo del curso de la vida. Finalmente, aquí tiene el libro que cuenta nuestra historia.
Tener un pródigo afecta a las familias de un modo profundo... En especial si usted es el hermano que no se descarrió. La autora comparte su propia historia conmovedora de lucha, pena y esperanza en este libro. Reconociendo cómo el enojo no resuelto del pasado puede seguirnos hasta la adultez. La autora ofrece maneras de curar el dolor de sentirse en segundo lugar con relación al afecto y la atención de los padres. Ella también escribe con sensibilidad acerca de perdonar a un hermano o hermana voluntarioso, sin justificar la conducta. Cualquiera que haya sido "el buen chico" en la familia, encontrará respuestas de entendimiento, y el conocimiento necesario para descargar el bagaje emocional de crecer con el pródigo de la familia.
0
0 opiniones