La Biblia describe a la iglesia como un cuerpo, como algo vivo. Todo organismo vivo y sano crece y se reproduce. Un bebé crece, y una vez adulto engendra hijos; una semilla da fruto y se multiplica. Dios espera lo mismo de la iglesia.
En estos tiempos han venido surgiendo "nuevos" modelos de iglesia, basadas en grupos pequeños. Este modelo responde con eficacia a las necesidades de la sociedad actual.
El grupo celular es una forma apropiada de evangelismo no tanto porque sea técnicamente eficiente, sino porque satisface necesidades y anhelos profundos, y por eso Dios bendice con la presencia del Espíritu Santo, el crecimiento numérico, espiritual, intelectual y social de la iglesia.
0
0 opiniones