El primer libro de Brian Edwards definía qué es el avivamiento y analizaba cuáles han sido sus características principales en tiempos de Ezequías y a lo largo de la historia de la Iglesia. Este segundo libro responde preguntas que aún quedaban en el tintero del autor: ¿Es el avivamiento una experiencia que enseña la Biblia? Y, si lo es, ¿podemos esperarlo en cualquier época? ¿Cómo podemos orar de forma eficaz por un avivamiento? ¿Qué cosas nos estorban para pedirlo en oración?
Este es, por tanto, un libro que trata de expectativas: las del pueblo de Dios en tiempos del Antiguo y del Nuevo Testamento, las de la Iglesia en la historia y nuestras propias expectativas. Este libro aborda cuestiones como qué podemos esperar, si podemos prepararnos de algún modo, qué pasa si no llega o si su costo no es el que esperamos. El autor responde a conceptos erróneos acerca del avivamiento y cómo comienza, advirtiéndonos incluso de una realidad que puede resultar sorprendente: "El avivamiento genuino no comienza por la felicidad, sino por la santidad, y la santidad comienza con lágrimas". En un tema donde hay tanta confusión, la base bíblica teológica que nos presenta el autor nos ayudará también en un plano práctico para suplicar, en palabras del profeta "Oh Jehová, he oído tu palabra y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos" (Hab 3:2)
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